Un grano no hace granero, pero ayuda a su compañero
Hace cuatro años la vida, de la que cada vez más me siento servidora, me mandó salir de ESNALCO, Escuela Nacional de Comercio, y me desembarcó en este lado del mar océano. Por esas fechas se iniciaban los diálogos que darían lugar al recién firmado Acuerdo de Paz entre el gobierno de la nación de Colombia y las FARC-EP.
Deseo, como contribución al esfuerzo de paz del país, hacer un recordatorio del esfuerzo que ESNALCO viene desarrollando por la convivencia y la conciliación, dentro de mis posibilidades y también de mi memoria, pues, en un sentido simbólico, la memoria de cada cual y, más importante, de las naciones, marcan derroteros y bueno es tener el valor de seguirlos cuando esa memoria abre la puerta al esfuerzo de construcción.
Acabo de utilizar en tres ocasiones la palabra esfuerzo. Y el número 3 tiene un sentido simbólico reflejado en aquella escultura, una talla de madera, construida con 9 columnas de altura creciente y dispuestas en espiral llamada Las columnas sostienen, las voces sostienen y que preside la Galería de la Memoria y la Conciliación de ESNALCO. Ganar altura en el espacio y ampliarse como una espiral que ha partido de un punto representan el esfuerzo del crecimiento. Tener el valor de encontrarse en el espacio de la Galería de la Memoria y la Conciliación para dialogar y llegar a un acuerdo exige un esfuerzo humano que, por sus repercusiones, se amplía como una espiral para llegar mediante su ejemplo a los demás integrantes de la comunidad educativa. Por esto cada vez que la Galería de la Memoria y la Conciliación se usa con ese fin, la comunidad educativa crece, no solo como un espacio que se amplía de manera horizontal en espiral, sino también de manera vertical en unas columnas de esfuerzo creciente y que representan al modo humano el valor de la voz y la palabra que como columna nos permite apoyarnos, como nos apoyamos entre los seres humanos.
Colombia está haciendo un gran esfuerzo. El país, los encuentros que han dado lugar a la firma del Tratado de Paz entre gobierno y FARC-EP, se han llenado de símbolos. Los símbolos nos sostienen porque en los símbolos nos apoyamos, ellos son un referente que crece como una espiral y se eleva hacia el cielo y hacia la ilusión siempre humana de mirarnos y crecer y tener la posibilidad de servir a la vida antes de que llegue el día en que yazgamos en posición horizontal en, quizá, la llamada de la tierra. Mientras, todo ser humano quiere participar de la luz, del sol, del aire, y esa ebullición que luz, sol y aire producen en él quiere vivirla junto a otros y participarla y conversarla. El esfuerzo es grande y arduo, naturalmente, nada valioso es fácil, todo lo hermoso es difícil. Lo más hermoso es encontrar un punto de participación, de diálogo, de acuerdo y plantar un pequeña columna que tenga la posibilidad de elevarse y ensancharse hacia otras tanto presentes como de un futuro en el que estarán los que nos siguen en el camino de la vida.
Hoy yo puedo aportar este grano para la paz y mi memoria me invita a ello, mi breve voz quiere susurrar a otras voces porque la voces sostienen los proyectos humanos como las columnas sostienen las casas y los hogares y ambas el esfuerzo de convivencia de las sociedades y las naciones. A continuación aquel artículo y sus razones que en su momento inauguraron este blog para que su memoria apoye el presente que exige el esfuerzo de todos.
ARTE Y CONVIVENCIA
Las columnas sostienen, las voces sostienen.
Espacio virtual de la Galería de la Memoria y la Conciliación
En los primeros meses del año 2011, en la Escuela Nacional de Comercio, conocimos de la muerte violenta de algunos estudiantes y de los familiares de otros. Estos hechos nos conmovieron hondamente, más aun cuando no tomaban relevancia en una institución cuya labor es contribuir a la educación.
Algunos de los integrantes de la comunidad educativa insistimos en que era necesario elevar una voz, y empezamos esta tarea. Simultaneamente fueron sustituidas en la antigua sede A unas columnas de madera del patio y surgió la idea de hacer con ellas un objeto de arte que ayudara a elevar la voz, como se elevan las columnas, y en cuya realización participaran los compañeros y los jóvenes que habían sufrido la pérdida. Se inició el trabajo y se contactó con padres de familia carpinteros, a la busca de una estrategia para integrar en este gesto a la comunidad educativa.
Ya iniciado el esfuerzo, empezó a diluirse en medio de los avatares relacionados con el abandono de la sede A. En un tiempo más llegó a nuestro conocimiento la apertura de un concurso público, en el que cabía el proyecto: participó, ganó.
Sin embargo, como ocurre a quien tiene un propósito que para lograr debe soportar múltiples pruebas, una vez reiniciado el proyecto debió ser detenido hasta que pudiera contar con los avales de la institución. Otras pruebas enfrentó aún en este lapso que también superó.
Galería de la memoria y la conciliación
Es el espacio para deponer la desconfianza y desconocer el encarnizamiento, donde mirarnos a los ojos y desarrollar el propósito de conciliar. La Galería de la Memoria y la Conciliación es espacio para hablar y relatar pues en estos actos nos reconocemos al reconocer al otro. Es espacio para recobrar lo que somos: memoria necesaria para la conciliación y aún el perdón. El perdón, acto supremo del hombre, nos permite volver a comenzar. La humanidad en 3.500 años de historia ha vivido un promedio de 13 años de guerra por uno de paz ¿qué sentido tiene seguir contribuyendo a esa proporción?
Escultura de la Galería: Las columnas sostienen, las voces sostienen
La escultura, que preside la Galería, es una espiral construída con nueve columnas crecientes. La espiral recuerda nuestra posibilidad de crecer como hombres, de conseguir ser lo que nacemos siendo, que, integrado con las columnas que se elevan, nos invita a pensar que necesitamos del apoyo y la buena fe del prójimo para conseguirlo, pues no se puede ser humano sin otros humanos o contra otros humanos. El número de las columnas es múltiplo de tres, tres veces tres, el triángulo simboliza la comunidad educativa, multiplicado por sí mismo expresa aritméticamente lo que se ha representado geométricamente.
